Los Realejos con los cinco sentidos
Representa la historia, en la torre de la Iglesia de Santiago Apóstol, la naturaleza y el sentir de sus gentes en el drago, y las siluetas finales, en el mar que baña nuestras costas, todo ello en un único trazo. Sobre el drago, en el poniente, aparece el sol, imitando una rueda de fuego que evoca la tradición pirotécnica de nuestro municipio y los atardeceres en el macizo de Tigaiga.
Los colores ofrecen una gama cromática que va desde el cálido naranja hasta el relajante azul de las olas, todas las tonalidades que el pueblo de Los Realejos ofrece al visitante, del monte hasta la playa, y que son el reflejo de las posibilidades que ofrece todo su entorno para un disfrute pleno. Con los cinco sentidos.