La historia del municipio de Los Realejos está ligada al final de la Conquista de la Isla de Tenerife, ya que fue precisamente en Los Realejos donde tuvo lugar la rendición de los valerosos menceyes guanches. Con respecto a este hecho el historiados realejero José de Viera y Clavijo nos dice:
La Bandera
La bandera de la villa tiene forma rectangular con una proporción de tres de largo por dos de ancho, dividida en dos franjas horizontales de igual anchura, siendo la superior de color azul celeste y la inferior de color blanco. En el centro del paño figura el escudo de la villa anteriormente descrito, siendo su altura de 2/5 del ancho de la bandera.

Escudo de Armas de La Villa
Escudo partido en pal, primero en campo de oro, la Cruz de gules (rojo) de la Orden de Santiago y en su punta, cruzados, a la derecha el Pendón morado de Castilla en una lanza, y a la izquierda una añepa guanche con una esterilla de hojas de palma de sinople (verde). Segundo, en campo de gules (rojo), tres castillos almenados, cadena y llave, todos de oro. Los castillos van colocados dos en jefe y uno en punta. La cadena cuelga por sus extremos de las almenas de los dos castillos en jefe, y de su centro pende la llave sobre el castillo en punta. Al timbre, corona real abierta.

Explicación
Lado derecho, contiene las armas de la extinguida Villa de Realejo Alto. Aparece registrado en 1.929 por el cronista oficial de Canarias Don Francisco P. Montes de Oca García. El campo de oro representa la riqueza de este territorio y en los demás elementos hace alusión a la paz firmada por el conquistador de Tenerife, el adelantado Don Alonso Fernández de Lugo, representado por el Pendón de Castilla, y los menceyes guanches, representados por la añepa adornada con palmas. Hecho que tuvo lugar en este territorio, donde se levanta el templo dedicado al Apóstol Santiago, de ahí la Cruz de la Orden de Santiago, ya que según la tradición fue el día del santo cuando se celebró este acontecimiento.